Antecedentes

Los antecedentes del Conservatorio de Murcia hemos de situarlos a principios de siglo XX, fruto de las preocupaciones y de las eficaces gestiones que en el año 1917 llevaron a cabo unos hombres muy ligados a la historia de la cultura de Murcia: Pedro Jara Carrillo, Isidoro de la Cierva, Emilio Díez de Revenga, Ángel Guirao, Antonio Ruiz-Funes y Mariano Sanz Fargas, entre otros.

La reunión fundacional tuvo lugar en agosto del citado año. Pronto se redactaron los estatutos y de forma simultánea se designó el profesorado que había de iniciar las actividades docentes.

Nace un centro de enseñanza musical bajo la forma jurídica de un patronato cuya presidencia ejerce Isidoro de la Cierva.

Año 1918 

 

Por Real Orden de 26 de septiembre se concede validez académica a los estudios de música cursados en este centro, auque carece aún de independencia administrativa.

El Conservatorio inicia pues, su andadura oficial en el curso 1918/1919. Las clases se impartían en el edificio de las Escuelas Graduadas de Santo Domingo, hasta que en 1920 se acuerda que el Centro se traslade al Teatro Romea, por cesión del Ayuntamiento de la ciudad.

Año 1931

 

Por Decreto de 11 de mayo se ordenaba que el Conservatorio de Murcia alcanzara la denominación de Centro Oficial del Estado, por la que había luchado durante trece años el patronato fundacional.

Año 1942

En el Decreto de 15 junio, en el que se clasifican los Conservatorios en Superiores, Profesionales y Elementales, el de Murcia alcanza el grado profesional.

Año 1966

Se publica el Decreto 2618/1966, de 10 de septiembre, de gran importancia, ya que en el se establece un

Plan de Estudios de Música. En su última disposición transitoria, nombra a todos los Conservatorios Existentes en aquel año. Entre los estatales sólo existía un Superior, el Real Conservatorio de Madrid, y cinco Profesionales, Córdoba, Málaga, Murcia, Sevilla y Valencia.

En el Conservatorio Profesional de Murcia se impartían, además de las enseñanzas de música, las de Arte Dramático y Danza.